El artista de origen escocés Rob Mulholland, crea siluetas en medio del bosque (al más puro estilo de la película “Depredador”, 1987), trayendo el misticismo asociado a estos.
Su trabajo consiste en montar figuras fantasmales, formando figuras humanas y dando el efecto óptico necesario gracias al Perspex, un cristal acrílico reflejante.
El propio artista cataloga su trabajo como una “alteración de la realidad”. Todo depende del momento en que se ve: “en un momento se observa la figura y al rato desaparece en el bosque”.