Alexandre Farto, de origen portugués, es un artista urbano que ocupando un taladro como pincel, crea figuras, rostros y lo que él quiera transmitir a las personas que pasen por donde deja su huella.
Su técnica se basa en acelerar el deterioro de los muros con taladros o cinceles, creando imágenes en la vía pública y dar un poco de arte a las calles siempre invadidas de publicidad.
Como el mismo Farto (también conocido como Vhils) señala “hacer retratos en la ciudad es un intento por devolverle humanidad”, palabras muy acertadas del artista que entre tanta modernización e individualismo existente hoy en día, las artes son una especie de oasis en el desierto, sobre todo si se trata de intervenciones urbanas.