Luces horizontales y verticales, líneas que se mueven a poca velocidad en un blanco y negro proyectadas con una fina bruma y convertidas en dibujos de dos dimensiones recorriendo lentamente el techo o la pared y que parecen estructuras sólidas y tangibles de luz en el espacio.
Con estas palabras, se puede describir la primera exposición en Alemania de la obra de McCall denominada: Cinco minutos de pura escultura.
Con respecto a su obra y duración de ella, el artista de origen británico se refiere “Muchos me dicen que creían estar mirando 15 minutos, pero cuando se dieron cuenta, habían estado una hora observando”. El artista agrega que, “todo parece ralentizarse gracias al silencio, es contemplativo”, dice.