Lou Bauchi, una artista originaria de Pekín, China, ha dedicado 2 años de su vida para crear un cuadro hecho con cáscaras de semillas de girasol, siendo literalmente y como se dice, un trabajo de chinos.
La obra de Bauchi, tiene 12 metros y refleja cerca de 900 personajes y varios árboles, todos hechos con el pequeño material.
Con respecto a su obra, la artista confesó que es bastante complicado trabajar con cáscaras de semillas de girasol, además de tardarse mucho en el tiempo de elección del tamaño y color de la cáscara.
La artista china, buscando en su trabajo salir de lo habitual ha dedicado dos décadas a realizar obras con este material, pero es su último cuadro, el más grande hecho en la carrera artística de Bauchi que también cuenta con varios seguidores en su ciudad natal.