Un total de 23 lápidas prehispánicas de cerca de 550 años de antigüedad fueron halladas por arqueólogos en el Templo Mayor azteca en Ciudad de México.
La grabaciones inscritas en la lápida, muestra imágenes de personas, ornamentos, serpientes y guerreros que citan pasajes de la antigua cultura.
Considerados, según el arqueólogo Raúl Barrera, los restos de gran valor debido al lugar en que se encontraron: el recinto sagrado de Tenoctitlan; las imágenes los mitos con los que se asocia a la antigua civilización: el nacimiento de Huitzilopochtli y el origen de la Guerra Sagrada.
Además de estas piezas, existe otra en que aparece un cautivo arrodillado con las manos atadas y se aprecia una lágrima cayendo de su ojo.