La galería Tate Modern de Londres, Inglaterra, exhibe la mayor retrospectiva de Roy Lichtenstein, que se caracterizó por explorar el surrealismo, futurismo y expresionismo en su obra.
Un total de 125 trabajos se exhiben por estos días y hasta el 27 de mayo en la galería, que incluye pinturas esculturas en cerámica y bronce, collage y obras en papel.
Entre las obras emblemáticas del artista y que se pueden exhibir en la exposición se encuentran Look Mickey (1961), su primera creación pop; Whaam! (1963), una de sus más conocidas escenas de guerra; y Drowning girl (1963), una de sus distintivas chicas románticas.
También se podrá apreciar el lado menos visto del artista, como sus comienzos pintando objetos cotidianos en blanco y negro o sus noventeros desnudos, interiores, e incluso, paisajes chinos.
Pero eso no es todo, ya que en marzo, se sumará a la exhibición la proyección de Three landscapes (1970), su único filme que por vez primera se mostrará en Europa.
A 15 años de su muerte, el trabajo de Lichtenstein se considera un aporte central al pop art, que en subastas (obviamente después de muerto, la locura de que el arte vale más una vez muerto el artista que en vida) ha superado la no despreciable suma de 40 millones de dólares.
Por otro lado, en julio próximo la muestra se trasladará al Centro Pompidou, en París.